En un mundo donde cada vez se le presta más atención al aspecto ecológico, donde se busca una mayor presencia al elemento "verde", han ido apareciendo distintas opciones para conseguir un pavimento natural apto para el paso de vehículos.
En esta entrada, vamos a comparar dos de ellos.
Por un lado, tenemos los paneles de PVC tipo "panal de abeja" (comercializados por distintas marcas y con distintos nombres):
Estos paneles están pensado para ir colocados bajo la superficie, sobre zahorra, y cubiertos por unos 2 cm. aproximadamente de tierra vegetal, donde se siembra el césped.
El mayor problema de este producto, es que, en zonas donde el nivel de precipitaciones es medio/alto, una vez la tierra se ablanda por acción de la lluvia, la presión que ejercen los vehículos se realiza directamente sobre el césped, produciendo, no solo el aplastamiento del mismo, sino la muerte del manto derivada del efecto cuchillo que tienen los cantos de la pieza sobre las raíces del césped:
Una vez se produce la muerte del césped, al quedar solamente la tierra vegetal del lecho, se va produciendo el lavado de dicha tierra por efecto de las lluvias y el paso de vehículos, quedando finalmente la plancha de PVC al descubierto:
En contraposición, tenemos la Losa Césped prefabricada Pregalco, cuya finalidad es la misma, la de conseguir un pavimento verde, apto para paso de vehículos, pero cuyo funcionamiento es totalmente opuesto, pero a la vez más efectivo.
Colocado, al igual que los paneles de PVC, sobre zahorra, la diferencia radica en que la Losa Césped Pregalco queda vista en superficie, naciendo el césped en los huecos de la celosía.
Lo que a simple vista parece una diferencia puramente estética, tiene una función mucho más importante. A diferencia del PVC, donde el césped es quien sufre el peso de los vehículos, en la Losa Césped Pregalco, es la propia losa (de 10 cm. de espesor) la que soporta dicho peso, quedando el césped salvaguardado, y evitando así la muerte del mismo y el posterior lavado del terreno por efecto de las lluvias:
Evidentemente, la colocación es muy importante, teniendo especial cuidado en tener una buena base de zahorra, con espesor contínuo y bien confinada para evitar fugas. A continuación, se prepara un lecho de 3/4 centímetros de arena sobre la que se posa la Losa Césped Pregalco, sobre el que se extiende un geotextil para evitar la mezcla entre el material del lecho y el de relleno de la losa, y además, del nacimento de "malas hierbas". Por último, se rellena la Losa Césped Pregalco de tierra vegetal y se siembra el césped.
